

Al finalizar la reunión contamos lo sucedido al pastor y a los demás hermanos, quienes propusieron ir a dejarnos devuelta. Cuando nos veníamos pasada la medianoche; mis hermanas, el pastor, su señora, dos matrimonios que nos acompañaban, al pasar de vuelta el puente, a metros de este sentimos una mujer que lloraba, al caminar por el puente más cerca se sentían los llantos, al parecer lloraba debajo del puente. El pastor le grito a la mujer; ¿señora que le pasa? posterior a eso, el llanto rápidamente se trasladó al otro extremo del puente (a la salida). Seguimos caminando hasta el otro lado del puente, el pastor y los otros hermanos le gritaban a la mujer; ¿donde esta señora? ¿qué le pasa?, pero el llanto volvió a alejarse, pero a la vez sentirse más fuerte y aterrador también, al llegar a la vuelta de la calle O’Higgins, el pastor decidió bajar con la linterna y dos hermanos a ver la mujer que lloraba, mientras nosotras quedamos solas en el camino. Cuando bajaron, vieron a la mujer a la orilla del río, al acercarse vieron que ella tenía una guagua en sus brazos, cuando la alumbraron ella caminó hacia las aguas desapareciendo en ellas de una forma aterradora, difícil de explicar. Corrieron hacia donde estábamos nosotros, no pudiendo hablar, estaban como en estado de shock, no nos decían nada, sólo caminaron llevándonos hacia la casa.
Tanto le insistimos, que nos contaron lo que habían visto, era una aparición que todos habíamos oído y ellos habían presenciado, algo que por cierto no era bueno, no de este mundo por lo menos.
Esa fue sólo la primera vez que la oímos, luego en ciertas ocasiones escuchábamos sus llantos cerca del puente, más fuerte o con la misma intensidad. Aún recuerdo como si fuera ayer, la última vez que la escuché, cuando entre sus llantos llamaba a mi hermana con esa voz y ese llanto desgarrador pronunciando; ¡Chávela, Chávela!
Ana Beatriz Vásquez González
Excelente historia.
ResponderEliminarExcelente historia, algo tenebrosa porque sé lo que era caminar a oscuras por el recordado puente viejo.
ResponderEliminar